1909 | El Anciano Rey de los Vinos, entre el Palacio Real y la Almudena

El Anciano Rey de los Vinos, es una de las tabernas más legendarias de Madrid. Fundada en 1909 está en la calle Bailén, al lado de la espectacular Plaza de Oriente, donde se puede contemplar la efigie de Felipe IV. Considerada la primera estatua del mundo, que se sujeta solamente por las patas traseras del caballo.

Muy cerca se encuentran tres de los edificios más emblemáticos: el Palacio Real, construido por Felipe V en 1738, el Teatro Real de 1850. y la Catedral de la Almudena.

En esta zona de gran belleza podemos hacer una parada en El Anciano Rey de los Vinos. Una taberna que permanece inalterable en el tiempo. Mantiene su fachada roja, y en el interior, sus azulejos de colores  y sus lámparas centenarias.

Un lugar donde tomar vermús de grifo, vinos y tapas.

Con platos tradicionales, como la Cazuela del Anciano o los Callos a la madrileña.

No dejéis de probar «El anciano», su vino dulce de Tomelloso, para acompañar las galletas de huevo, las torrijas o los pestiños.

Un buen plan; un paseo y unas tapitas.